sábado, marzo 03, 2007

Mercado de San Antonio

El pequeño mercado de pescados y mariscos proximo al puerto de San Antonio tiene un futuro incierto. Algunos locatarios indican que seran movidos para dar paso a un paseo peatonal, obligandolos a trasladarse a otro lado. Otros locatarios indican que en el lugar se construirá un casino de juegos, lo que también los desplasaría. Finalmente también conversé con uno que se sentía felíz porque aseguraba que nada de eso pasaría, y en cambio en lugar sería remozado, dandole mas brillo a las viejas instalaciones. Como sea, el lugar sufre un futuro incierto, y me inclino a pensar mas bien que será erradicado, como siempre sucede. Es la vieja ley de los desplazamientos de aquellos con menos poder. Esta probable pérdida de un modo de vida, me motivó a iniciar un reportaje del lugar, su gente y el dificil oficio del mar, que tan bien se ve reflejado en su gente.
Presento un reportaje a esos hombres y mujeres que por años han trabajado en ese lugar.

























jueves, febrero 08, 2007

Nuestras biografías se transparentan

San Antonio, enero 2007

Como apasionado fotógrafo, siempre estoy en la carrera desesperada por conocer al menos un letra o coma que no halla leido, de aquellos fotógrafos que admiro y en parte me debo a. La red ha sido fundamental en ese sentido, aportando sobre todo con muchisimas imagenes, y una que otra apetecida entrevista, que normalmente uno le relee una y otra vez, como buscando algo que se pudiera haber escapado de ese talento admirado.
Por cierto lo que uno busca además de las formulas de como llegar a ser como ese personaje, es en el fondo, su biografía escrita por él, y en la cual uno pueda ver, aún a riesgo de que la comparación sea grotesca, cuan parecidas son sus vidas personales con la de uno, desmitificando de paso ese rango impuesto por uno mismo, de superhéroes, con lo cual uno gana una aparente tranquilidad en cuanto a que el salto para llegar a ser como ellos, desde el status de ciudadano común, no es tan dificil, aunque obviamente lo es. Pero no hay como el auto engaño para justificar el no haber dado el salto a esa vida admirida e idilica en apariencia.

Pero poco de eso había en la red hasta que aparecen los blogs como fenómeno. Y digo fenómeno porque se instalan casi como una obligación, en el sentido de que todos tienen que tener su blog, desde el ciudadano mas común, al mas famoso.

Entonces, junto con los blogs, aparecen los de estos fotógrafos que admiro, y comienzo a enterarme desde su propia letra, de su vida y sus pensamientos. Así, me he enterado desde cómo se le tapó el water a Alec Soth una noche cualquiera, hasta del hijo surfer de David Alan Harvey.
En otras palabras, nunca soñe que podria llegar a leer diariamente el diario de estos seres míticos, escritos por ellos mismo. Y no solo eso, si no que, a diferencia de antes en que acudía a FedEX para enviarles mis libros, con la esperanza que los recibieran, y luego me mandaran alguna carta con sus comentarios, puedo ahora responder y opinar de sus reflexiones, dado que ese es el formato de los blogs (de lo contrario tendrian un sitio web).

También puedo enterarme de su "work in progress" por ejemplo, de sus contínuos proyectos fotográficos, entre otros. Así mismo puedo conocer el mural de fotos personales que tienen pegados en sus casas y que nadie mas que sus mas cercanos conocían, hasta ahora.

El ciudadano hace su vida pública.

viernes, enero 12, 2007

jueves, enero 11, 2007

Arquitectura chilena contemporanea




A propósito de mi insipiente trabajo documental de Llo Lleo, creo que son precisamente estas construcciones tan comunes y homogeneas a lo largo del territorio nacional, presentando varianes mínimas, tales como el uso de la madera, adobe o concreto, las que conforman con mucho derecho la verdadera identidad arquitectónica nacional. Lo que pasa es que ningún arquitecto quiere reconocer ese simple hecho, e intentan hacernos pensar que la arquitectura chilena contemporánea la representa el edificio Consorcio, las obras de Duhart, etc. No digo que no tengan valor, sí lo tienen en el contexto de la arquitectura occidental, pero son corrientes europeas que poco o nada comparten la identidad nacional. En cambio estas pequeñas casas, quioscos, y comercios al rededor de una plaza, radican su valor en el hecho de que representan el símbolo in situ de la hibridación cultural tan propia de nuestros paises, a propósito de las corrientes de la globalización.
Digo hibridación cultural, porque aunque no lo parezcan, a simple vista, la mayoria de estas construcciones va sufriendo a lo largo de su vida una serie de transformaciónes, desde el techo de tejas, al uso del zinc, desde la pintura plomiza, al uso de colores saturados, etc, y que hablan de esa cultura en movimiento que de una manera tan fuerte absorve la clase media. Por cierto también esta el progreso, a la manera de las ampliaciones, todas sin escepción, incoherentes con la propia línea arquitectonica (hibrida) de la casa.

lunes, enero 08, 2007

Nuestro mundo sagrado

Llo Lleo Dic. 2007

Siempre me han gustado las casas de pueblos pequeños y mejor aún, de esos que vemos de paso camino hacia algún lugar de mayor interés.
Me agradan porque a diferencia de las casas de grandes ciudades, en donde todo se esconde, transformandose cada una de ellas en fragmentaciones de la ciudad; las casas de pueblo en cambio, por obra de sus habitantes, buscan lo contrario. La exhibición de todos esos objetos-logros, frutos de tanto esfuerzo, y que como tales, deben ser mostrados como parte del orgullo. La evidencia del cuidado extremo de estos objetos sagrados también resalta.

Que notable es ese afecto al logro económico, y que parece mas noble que ese afán de acumulación tan propio de nuestros tiempos. Por supuesto y al igual como acabó con el puritanismo de Estados Unidos, este logro económico se articula a partir del crédito.
También están los motivos religiosos como decoración, que a algunas propiedades las transforman en verdaderas hermitas.
También está el color, de todos los tipos, que adornan como júbilo a estas casas, en un esfuerzo por ser distintas a la del vecino (las nuevas poblaciones plantean un desafío dificil de diferenciación e identidad).

Es un mundo que me fascina y busco documentar. Al respecto, me estoy concentrando específicamente en Llo Lleo y seguramente San Antonio. Espero ir publicando imagenes de este proyecto.

martes, diciembre 19, 2006

Palabras: sin palabras...

domingo, octubre 01, 2006

El uniforme de mi tatara...


La palabra tatara abuelo siempre me ha parecido, ademas de extremadamente lejana, un pequeño traba lengua.
Como sea, he tenido que cargar, al igual que todos, con el legado de mis antepasados, que en el caso particular de mi tatara abuelo, no tiene nada de común. Todo lo contrario, desde el momento en que se lanzó al abordaje todo cambió definitivamente, tanto para él, su familia, y los que venimos descendiendo posteriormente. De pasada el pais se gano un héroe, el cual siempre es bienvenido en un pais tan hambriento de este tipo de personas (hoy los hérores han migrado hacia el deporte que es donde esta la gran oportunidad de ser uno).
Ahora, para ser honesto, mi vida nunca ha tenido nada fuera de lo común por ser descendiente del héroe. Y esto se lo debo a la gente. Gracias a mi gente, ni a mi ni a nadie de los descendientes les han dado demasiada pelota, salvo uno que otro 21 de mayo. No somos los Kennedy en ese sentido. Y la razón es muy simple de urgar. Se debe exclusivamente a la sobrecogedora ignorancia del pueblo (y desinterés por cierto). En un país como el nuestro, esto no tiene nada de fuera de lo común. Ser descendiente de futbolista famoso es otra cosa.

Mi verdadero rango de héroe, como me hizo ver un amigo, fué justamente el fin de semana en que acompañado de mi hijo de 5 años, fuimos al cerro que está detrás de mi casa, cámara en mano ambos (él con una vieja Polaroid sin pelicula), aprovechando el verdor que aún se mantiene en esta epoca del año. Hace tiempo que no fotografiaba naturaleza, al menos de la forma en que solía hacerlo, me refiero con un estilo contemplativo, la cámara sobre su tripode, composición y fotometría cuidadosa, etc.
Fue reconfortante la verdad. Pero lo mas importante, y aquí vuelvo a lo de héroe, es que estos momentos no se le olvidarán a mi hijo Santiago. El hecho de hacer una actividad de grande, y vero como el padre la desarrolla significa mucho para él.
que mas se puede pedir.

De todas formas con esta imagen pretendo hacerme un poquito de cargo de mis antepasados...