Lomas del sur

Es dificil no identificar la IX región con el clásico paisaje de lomas. En verano amarillas, y en invierno completamente verdes. El privilegio de verlas y correr cuesta arriba, y luego cuesta abajo, en esas freneticas carreras infantiles similares a caballos desbocados, en donde rodar por la ladera era parte de la entretención, es memoria imborrable. Al menos en mi caso.

Es un paisaje en transformación. He podido constatar cómo comienzan a ser aprovechadas en técnicas nuevas de sembrado, transformando el paisaje en dirección a la industrialización del campo. Creo que algún día voy a registrar ese cambio con mi cámara...

El sendero de la memoria

Los veranos de mi infancia bien pueden sintetizarse en esta imagen, la cual tome muchos años después de que pudiera empezar a recordarla, como el viaje prometido a un verano intenso, año tras año. Es una imagen del camino que lleva al río en donde día tras día tendíamos toallas en un escarpado borde, para pasar la tarde entera bañandonos en el posón que en esa parte forma el río Malleco.

El camino y el posón poco han cambiado a lo largo de los años. La imagen tampoco ha pretendido hacer un registro del paso del tiempo. Sólo ha tomado prestado un montón de arboles, arbustos y un camino, de manera de poder configurar una evocación universal de lo que podría ser un sendero. En mi caso, un sendero ligado profundamente a la memoria. En el caso de otros, quizás la metáfora y el misterio del sendero al cual no se sabe donde llevará... y que tal vez por eso, es siempre una esperanza abierta.